Todos hablan mucho. Los medios, el banco central, el gobierno, los partidos, las asociaciones, las agencias inmobiliarias, los de las estadísticas y datos, todos están sentados como si estuvieran mirando una película de horror.
Cuando se termine la película van todos a sus Casas. Luego cada uno a sus ocupaciones. Todos tienen un buen sueldo, un Empleo decente. Muchos de ellos se le curaron para estar competitivos. No robaron nada. Ya está. El horror no entra en sus casas que pueden financiar o alquilar.
Los que mueven realmente los hilos no aparecen en las pantallas, los especuladores y fondos de inversiones tampoco. Los actores que agitan el Mercado tampoco. Las metas escondidas de un capitalismo salvaje extremo. El verdadero poder siempre está en la sombra sin apellido, con un rostro anónimo.
El ruido es parte del escenario, está previsto, deseado, organizado. La catástrofe es siempre un motivo de atención. Más se documenta todavía mejor. La intensidad de la información concentra y multiplica aún más la magnitud de la diversión. Es como una avalancha en el invierno arrasando un pueblo. Deja a su gente sin casa, no saben donde ir. Si hay pérdidas o sangre mejor todavía elevando el nivel de las emociones.
La solidaridad moral arrasando el país entero. Las autoridades abren centros de acogida que pronto se cierran sin resolver nada realmente. Prometen fondos de recuperación que no llegan a tiempo nunca. Pasa rápidamente al olvido, como la gente del volcán, de la DANA, de los pueblos con los incendios forestales. La crisis de los alquileres…
Con la crisis inmobiliaria hay urgencias anunciadas desde hace años. Hay responsabilidades estatales en este tema. Es como el barranco normalmente seco, llegando ahora raudales una avalancha de gente, son miles de ciudadanos que llegan al mercado laboral, nuevas familias enteras, estudiantes, diplomados, jubilados expulsados que buscan alojarse. El problema es gordísimo. La olla de presión está en marcha con fuego alto. Se está cocinando un guiso poco amistoso. En los peores sitios de la desesperación, como los asentamientos ilegales, hay corte de luz. La Cañada de Madrid, por ejemplo. La pobreza castigada por sus propios creadores. Una constitución de papel mojado. La Vivienda como un Derecho que se aleja de la realidad de hoy.
La subida de los precios no es una casualidad, es deseada con los inversores y especuladores. Más suben los precios, más champán en los salones. A qué le puede importar la gente que trabaja ocho horas al día. Ellos no aportan nada positivo al inversor. Le interesa la gente con alto poder adquisitivo. Los que pueden hacer funcionar la rueda financiera. El gran casino de la especulación.
Nadie aporta soluciones. Porque los que argumentan forman parte del espectáculo.
Creen que se quedan al buen lado de la historia. Surfean en la ola para no caer en el olvido como estos miles y miles de Jóvenes, nuevos trabajadores, familias modestas, jubilados que necesitan levantarse cada día para sostenerse. Aquellos que desde siempre deben calcular al centavo sus gastos. Sus sueldos nunca aumentan aplastados por la inflación u otras historias de eterno engaño. Ahora están expulsados de sus hogares. Deben huir para ir más lejos donde todavía no aumentaron los precios de manera tan abusiva. Todo es peor para ellos. Ahora deben gastar para su transporte al trabajo, perder horas en los atascos. Destruir su calidad de vida. Un montón de nuevos problemas a solucionar. Es insano y cruel. Todo eso por un puño de especuladores sin etica. Pisando la decencia y los buenos modales. Son sin vergüenza y que Dios se recuerden de ellos.
Más demanda que oferta te dicen, otros que no hay terrenos, otros que la administración es pésima, otros que todo es muy barato, otros que el sueldo es muy bajo, otros que hay que construir viviendas sociales, otros que dicen no hay dinero, otros dicen que la culpa es la inflación, la pandemia, la crisis de antaño, la seguridad jurídica o lo que parió. Cada uno con su teoría. Todos tienen la razón. Muchas explicaciones, hay que hacer esto o el otro. Ninguno propone una solución realista. Que esperan para remangarse sus camisas. Porque lo van a hacer….Esto no va a acabar bien.
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Ser Marca PersonalLa base de la pirámide es el sustento de todos los de arriba. Cuando empieza a hacer demasiado calor en tu entorno busca un ventilador o sales a codazos a buscar aire fresco. La gente, como el dolor, tiene su escala de resistencia. Llega el momento del hartazgo. Será tarde para actuar.
Los políticos juegan a varias bandas. Deberían rectificar para restablecer más equidad en la Sociedad. Todos tenemos un sitio en ese país. No es cosa de unos pocos, solamente con ventajas a costa del que no tiene nada. La sociedad está cada vez más funcionando con dos velocidades, donde en primera instancia es simplemente un lugar de escasez permanente, con destrucción sistemática y voluntaria de la felicidad.
La democracia no es un lugar de recibo para este tipo de estrategias. Los de derecha o de izquierda se parecen como dos gemelos en esta materia. Qué raro, el liderazgo entonces no está en sus manos funcionando como títeres de algo más grande que ellos. Meter un poco de orden no sería mala idea para recordar que el pueblo siempre se despierta en algún momento. No se juega con el lugar donde se vive. El Hogar.
Viva la vida.
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