El colectivo ecologista Youth Climate Save Valencia ha instado al alcalde de San Fulgencio, José María Ballester, y a la concejala de Medio Ambiente, Transición Ecológica y Protección Animal, Sara Nolasco, a que sigan el ejemplo de otros municipios y sustituyan las botellas de plástico de un solo uso en los plenos municipales por alternativas sostenibles, como jarras de agua y vasos reutilizables.
Sin embargo, desde la organización denuncian que, tras enviar la petición por correo electrónico hace más de una semana, no han recibido respuesta por parte de ninguno de los responsables municipales.
La solicitud se produce en un contexto político incierto. Aunque el Ayuntamiento está actualmente gobernado por el Partido Popular, el grupo socialista y un concejal no adscrito han registrado una nueva moción de censura. Alegan que no se incumple la prohibición de presentar dos censuras en la misma legislatura, ya que la anterior no llegó a debatirse. La sesión fue levantada por la mesa de edad argumentando que uno de los firmantes aún no figuraba oficialmente como no adscrito, a pesar de que el secretario municipal advirtió que esa circunstancia no afectaba legalmente a la validez del proceso.
Mientras se dirime el futuro del gobierno local, Youth Climate Save considera que tanto Ballester como Nolasco tienen la responsabilidad de actuar y adoptar medidas sostenibles mientras permanezcan en el poder, ya que el conflicto podría alargarse durante meses o incluso judicializarse.
“Planteamos algo tan sencillo como reemplazar las botellas de plástico por jarras de agua. El impacto ambiental del plástico es devastador: contamina playas, ríos y montañas, y supone una amenaza para miles de especies Animales”, ha explicado Diego Nevado, voluntario del colectivo. “Estos residuos tardan más de 400 años en degradarse, liberando toxinas peligrosas para el medio ambiente y la Salud”.
Según datos del colectivo, cada año se generan más de 13 millones de toneladas de residuos plásticos, la mayoría sin reciclar, que terminan en vertederos o en los océanos.
Chiva, un ejemplo a seguir
En contraste con la falta de respuesta en San Fulgencio, el Ayuntamiento de Chiva ha sido el primero en la historia del municipio en celebrar un pleno libre de botellas de plástico, gracias a la presión ciudadana de Youth Climate Save. En su lugar, se utilizaron jarras de agua y vasos de vidrio reutilizables.
“En cada pleno se utilizaban unas 33 botellas. Multiplicado por los 12 plenos anuales, supone evitar unas 400 botellas al año que no acabarán como residuos”, explica la organización.
Para Emi, organizador de Youth Climate Save Valencia, este gesto supone mucho más que una acción simbólica: “Esto sienta un precedente. Cuando activismo y política van de la mano, la participación ciudadana cobra sentido. Y eso es el auténtico tesoro de la democracia”.
El colectivo lleva meses impulsando esta iniciativa dentro de su campaña por la coherencia institucional frente a la emergencia climática, subrayando la importancia de educar desde la infancia en el respeto real por el medio ambiente.
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Youth Climate Save Valencia ha trasladado también la petición al Partido Socialista de San Fulgencio, ya que si prospera la moción de censura, la alcaldía recaería de nuevo en José Sampere Ballester, exalcalde del municipio.
El colectivo insiste en que adoptar este tipo de medidas sostenibles es un paso básico pero urgente en la lucha contra la crisis climática.
Las acciones y novedades del colectivo pueden seguirse a través de su cuenta de Instagram: @youthclimatesave_vlc.
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